Éxito de la nueva tienda oficial del Córdoba CF

El pasado viernes 13 de julio se inauguro la nueva tienda oficial en el estadio de El Arcángel, coincidiendo con la presentación de las nuevas equipaciones Nike de la temporada 2012-2013. A día de hoy, podemos afirmar que hemos superado en más de un 80% el total de las ventas de los dos establecimientos situados en la calle José Zorrilla y del centro Comercial Eroski.

Córdoba frente al misterio: el zombi de los Tejares

Cuando Fernando de Cárcamo se asomó a la puertecilla trasera de la casa, la mujer se sobresaltó primero, pero luego debió ver el cielo abierto. El joven noble estaba disfrutando de una de sus correrías nocturnas por la ciudad, las cuales le habían hecho famoso y poco popular entre los vecinos, cuando los gritos desgarrados de aquella señora le habían obligado a acercarse a ver qué pasaba.

Oyendo las voces, había dado un par de vueltas por las cercanías del convento de la Merced, adonde había llegado saltando la muralla junto a la puerta de Osario (ele), y al final se había encontrado la escenita de una mujer amortajando a su marido muerto, mientras dormía, en mitad de la noche veraniega.

El juerguista hizo de la necesidad virtud y le dijo a la buena señora que se fuera a buscar al cura del barrio de San Juan, mientras él se quedaría con el muerto en un patio. El Cárcamo se debió sentar delante de aquel hombre, rezaría alguna oración y luego se quedaría tamborileando con los dedos en alguna mesita, pensando quién carajo le mandaría meterse donde no le llamaban.

Pasaron unos minutos, don Fernando casi daba cabezadas, cuando oyó algo, se volvió hacia el difunto, y lo descubrió sentado en la cama, mirándole fijamente. En el siglo XXI, pasado el susto inicial, habría buscado una cámara oculta, pero en el siglo XVI no había de eso. Tampoco se le pasó el susto inicial, porque el muerto se levantó y caminó hacia él con las manos extendidas.

El caballero se defendía, según cuentan las crónicas, “pareciéndole cobardía arremeterle con las armas que el otro no tenía”, así que se zurraron a manotazos, con el amortajado intentando ahogar al Cárcamo. A eso de las tres de la madrugada, cuando apenas le quedaban fuerzas para defenderse, el joven vio cómo el difunto le soltaba, se retiraba a su lecho y se volvía a tumbar inerte. Dio unos pasos atrás, se sentó también, blanco como la cera, y en ese momento abrió la puerta la señora, que ya venía acompañada.

Después de recibir los agradecimientos, don Fernando de Cárcamo, en vez de volver a entrar a la ciudad, caminó hacia el norte, cuando el cielo ya empezaba a clarear. Se presentó en el convento de San Francisco de la Arruzafa, del que hablamos hace poco, y tomó el hábito esa misma mañana, arrojándose entre lágrimas al guardián del convento. Allí vivió el resto de su vida, y allí murió entre la admiración de toda Córdoba por su conversión.


“Casos notables de la ciudad de Córdoba”, anónimo. Edición de Francisco Baena Altolaguirre, 2003.

Encuentro con Pedro Roso en el Aula de Poesía de la Posada del Potro

Será en un encuentro con Pedro Roso, un homenaje a la labor de impulso poético que el catedrático realizó en los 90.

El Aula de Poesía de la Posada del Potro supuso un antes y un después en la creación poética cordobesa actual, sobre todo por la influencia que ésta tuvo en la emergencia de toda una generación de escritores que bebieron de las enseñanzas que el Catedrático de Lengua y Literatura, Pedro Roso, desarrolló en ella.

Con la intención de rememorar ese espíritu y homenajear al encargado de forjarlo, la novena edición de Cosmopoética ha preparado un encuentro que lo tendrá como protagonista.

Así, el domingo 30 de septiembre, a las 21 horas Pedro Roso volverá a la Posada del Potro, ahora Centro de Arte Flamenco Fosforito, acompañado de algunos de los que fueron sus alumnos para recordar aquella etapa y hablar de poesía “estar en Cosmopoética siempre es grato y hacerlo rodeado de amigos, aún más”, destaca Roso. Eduardo García, José Luis Rey, José Daniel García, Jesús Aguado, Pablo García Casado, Antonio Luis Ginés, Juan Cobos Wilkins y Federico Abad conversarán sobre esta iniciativa, que se forjó a principios de los 90, y  aportarán su experiencia de primera mano.

Pedro Roso, quien afirma sentirse “muy gratificado y contento por este gesto”, asegura que por aquel entonces confluyeron una serie de líneas que hicieron que esta iniciativa se desarrollara así y añade que hay que huir de mitificaciones porque “cada momento tiene sus características y necesidades y, desde la perspectiva, lo que sí pueden llevarse quienes asistan al encuentro es el aprendizaje de una experiencia” en la que la autogestión estaba muy presente.

En este sentido subraya que para aquellos jóvenes que tengan inquietudes literarias es fundamental “no encerrarse en las cuatro paredes de la ciudad y fomentar encuentros con escritores de otros lugares para compartir experiencias”.

El Aula de Poesía de la Posada del Potro intercaló lecturas de algunos de los mejores poetas de aquel momento con talleres formativos que sirvieron de impulso para que muchos de los escritores más representativos de la poesía cordobesa de la última década encontrarán al autor que llevaban dentro y comenzaran a publicar en los cuadernillos del Aula, conocidos como Pliegos de la Posada.