La corrida que pagó el monumento a Manolete

De gustos no hay nada escrito, de modo que, aunque a mí no me gusta, ya nos conocemos y nos llevamos bien. Hace mucho tiempo que leí mi descripción favorita del monumento a Manolete de la plaza del Conde de Priego (Santa Marina, vaya), y ahora no lograba volver a encontrarla. Lo asociaba vagamente con el estilo Harazem, y por ahí me ha venido la respuesta. Fue Carlos Castilla del Pino, en su artículo Apresúrese a ver Córdoba, el que lo describió de esta manera:

La destrucción comenzó emplazando allí el monumento a Manolete, horrendo pisapapeles de tamaño descomunal, que tiene el honor de figurar en la antología del mal gusto mundial” [y aporta cita].

Pero el pisapapeles kitsch al que nos hemos acostumbrado no salió gratis. La pasta para la obra, que sería luego encargada a Manuel Álvarez Laviada (800.000 pesetas de la época), se quiso reunir por suscripción pública pero el pueblo no estuvo por la labor. Al final provino, como cuenta la Cordobapedia, de una corrida de toros con matadores españoles y mexicanos celebrada el 21 de octubre de 1951, domingo para más señas, y cuyo folleto llegó a mis manos hace unas semanas, como me llegan últimamente algunas verdaderas maravillas del siglo pasado.

Aquí lo dejo, adornado de topicazos cordobeses y con publicidad y todo (sombrerería Rusi incluida). Diez toros, diez, uno de cada ganadería, con un estadillo para permitir al público explayarse en su crítica taurina. Por mi falta de cultura del tema o mi castellanidad de sangre, sólo conozco a dos toreros de la lista, Lagartijo y Calerito. A éste último, por la calle de la academia “Número e”, lo reconozco.

Foto del monumento tomada de Cordobapedia. 

XX Premio de Poesía Ciudad de Córdoba "Ricardo Molina". 2012

Del 12 de marzo de 2012 al 17 de septiembre de 2012.

BASES (Descargar aquí en PDF)

  1. Podrán optar al XX Premio de Poesía Ciudad de Córdoba “Ricardo Molina” cuantos poetas lo deseen, cualquiera que sea su nacionalidad, siempre que sus obras sean inéditas, no hayan sido premiadas en otros certámenes y se presenten escritas en lengua castellana, con una extensión de setecientos a mil doscientos versos. Cada autor sólo podrá presentar un poemario de temática libre. Quedan expresamente excluidos los autores que hayan obtenido en ediciones anteriores este premio.
  2. Los originales se presentarán por sextuplicado en ejemplares separados, numerados y a dos espacios por una sola cara, en formato A4. Los trabajos deberán estar debidamente grapados, cosidos o encuadernados y deberán presentarse sin firma, bajo lema y acompañados de una plica, con el mismo lema, que contendrá nombre, dirección, correo electrónico y teléfono del autor, así como un breve currículum vitae.
  3. Los trabajos podrán presentarse directamente o remitirse por correo certificado con acuse de recibo. Serán presentados o remitidos a la Delegación de Cultura del Ayuntamiento de Córdoba, (Plaza de Orive, 2; 14071 Córdoba), haciendo constar que el envío se hace al XX Premio de Poesía Ciudad de Córdoba “Ricardo Molina”. No se admiten trabajos presentados por correo electrónico u otro medio que no sea el antedicho.
  4. El plazo de recepción finalizará el día 17 de septiembre del 2012.
  5. El Premio está dotado con DOCE MIL EUROS y la publicación de la obra a cargo de la editorial Hiperión.
  6. Los derechos inherentes a la primera edición de la obra premiada serán del editor, que entregará al autor cincuenta ejemplares de la misma. Estas condiciones serán revisadas y acordadas en caso de nuevas ediciones. Transcurridos 5 años de la fecha del fallo, el autor tendrá libre disposición de su obra.
  7. Las obras seleccionadas por la Comisión Lectora serán propuestas al Jurado para el fallo del Premio. No obstante, los miembros del Jurado tendrán acceso al conjunto de los obras presentadas, si lo estimasen oportuno.
  8. El jurado estará compuesto por cinco miembros, designados por el Ayuntamiento de Córdoba entre poetas, escritores, críticos, académicos, profesores y personalidades relevantes de las letras. Actuará como Secretario, con voz pero sin voto, un funcionario del Ayuntamiento de Córdoba.
  9. El jurado emitirá su fallo inapelable antes del 30 de noviembre de 2012. Si las obras presentadas no alcanzaran la calidad necesaria el premio sería declarado desierto.
  10. Los trabajos no se devolverán y serán destruidos a los 10 días siguientes al fallo. No se mantendrá correspondencia con los autores de los libros presentados.
  11. Si con posterioridad a la concesión del premio se tuviese conocimiento de anomalía o incumplimiento de las bases, procederá su revocación por parte del Ayuntamiento de Córdoba, previa consulta con el jurado.
  12. La participación en el certamen conlleva la plena aceptación de estas bases, así como de la hipotética decisión del jurado ante cualquier imprevisto no recogido en las mismas.

Anotaciones al margen. Obra de Jacinto Lara

Del 14 de junio de 2012 al 22 de julio de 2012.

Anotaciones al margen es una exposición que presenta de manera monográfica la obra escultórica de Jacinto Lara. Muestra obras inéditas, y realizadas de manera específica para esta exposición, junto a trabajos anteriores. 24 piezas, entre las que se encuentra una obra electroacústica compuesta por Juan de Dios García Aguilera.

Nacido en Fernán-Núñez (1953) y afincado en Córdoba, este pintor, escultor cordobés es uno de los máximos representantes del arte contemporáneo en Córdoba y Andalucía. Con una trayectoria de más de 30 años en el mundo de la pintura, Jacinto Lara se mantiene en continua creación, con una obra extensa, profunda y sincera.

Descargue aquí la hoja de sala, lista para imprimir.

Recomendamos una visita al sitio Web del autor: www.jacintolara.es

Escultura de JLara: SERIE 4. Koans
Escultura de JLara:
SERIE 4. Koans

Córdoba celebra hoy el Día de la Música con varios conciertos

Concierto de Trompas
Museo Arqueológico de Córdoba

jvs.21.junio.2012 | 19.30h

El Museo Arqueológico ofrece un concierto con motivo del Día Europeo de la Música.

 

Orquesta de Córdoba
Gran Teatro

jvs.21.junio.2012 | 20.30h

Días 20 (Selección) y 21 (Premium) de junio – 2012. Concierto de clausura de abono.

 

Jam Session
Casa de la Juventud [Córdoba]

jvs.21.junio.2012 | 21.00h

Con motivo de la inauguración de las salas de ensayo de la Casa de la Juventud.

 

Sonora Band Cuarteto
Restaurante “El Cucurucho”

jvs.21.junio.2012 | 21.30h

Concierto de jazz, temas standars y clásicos. Liderado por María Alcántara, Sonora interpreta versiones de temas clásicos de jazz y también se sumerge en otros estilos como el bolero clásico.

 

XI Festival Internacional de Música Sefardí
Jardín Botánico

jvs.21.junio.2012 | 22.00h

De la Red de Juderías de España. Del 19 al 23 de junio de 2012.

 

Inesperada Sol Dual
El Café de la Luna [Córdoba]

jvs.21.junio.2012 | 22.00h

Luna+ Blitz! Dj sesión.

 

Axivil Aljamía
Jardín Botánico

jvs.21.junio.2012 | 22.30h

XI Festival Internacional de Música Sefardí. Clásica, Flamenco, Música tradicional.

 

Jam Session
Jazz Café

jvs.21.junio.2012 | 22.30h

Blues e improvisación.

 

Concierto Fin de Curso del centro de enseñanza de Música Harut
Salón de Actos CajaSur-Reyes Católicos

vrns.22.junio.2012 | 18.00h

 

Orquesta Joven de Córdoba
Círculo de la Amistad

vrns.22.junio.2012 | 21.00h

El cacique que se metió a político

Érase una vez una ciudad de provincias venida a menos, hasta quedar olvidada por el resto del país y encerrada en sí misma. Éranse una vez Córdoba y sus mentideros, sus gentes, sus tabernas y sus personajes. Personajes como la figura del cacique local, el hombre al que la ciudad, huérfana en buena medida de otros referentes, rendía pleitesía y daba culto, obedeciendo a unas normas no escritas que la sociedad se había ido encargando de definir.

El cacique parecía amable y benevolente. Como se podía leer en la prensa, quién sabe hasta qué punto conchabada, abría las puertas de su casa a los que necesitaban de su ayuda. En su despacho, en un jardín o en un aparte durante el café en alguna terraza, escuchaba las penurias de sus conciudadanos y, mientras acariciaba su blanca pelambrera, movía los hilos que fueran necesarios para prestarles la asistencia que necesitaran. Una pequeña cantidad de dinero, quizás, un papelito, una carta de recomendación, un poco de agilidad para según qué trámites.

Todos sabían dónde podían conseguirse esos favores, todos sabían cómo y dónde se movían aquellos hilos, aquella burocracia paralela. No eran los mejores tiempos para la democracia en el país en general, pero tal perversión del principio de que el poder emanaba del pueblo a través de las instituciones libremente elegidas provocaba sarpullidos, tanto en los que, por convicción, no comulgaban con ese sistema, como en los curritos que, por razones evidentes de número, no llegaban a recibir los favores del cacique. El poder no venía del pueblo, venía de la pasta. En última instancia, fuera bueno o malo, bienintencionado o paternalista, lo que le daba la influencia a aquel hombre era su posición económica.

Al menos, hasta que se metió en la política. La política abría muchas más puertas, permitía tejer una red mucho más amplia con nuevos mecanismos de influencia. Además, permitía entrar en un círculo vicioso en el que los favores pasados atraían los votos futuros, y ser un cargo electo facilitaba los nuevos chanchullos. Y en todo ese juego, se diluía no sólo la democracia, sino la propia dignidad de la sociedad, que renunciaba a defender como suyo el derecho a un trabajo o a una vida próspera, a cambio de recibir las migajas de un sistema clientelar. Es así como se llegaba a poner el carisma por encima de la eficacia, el amiguismo por encima del compromiso y, al final, la trampa por encima de la ley.

Los vicios de la Restauración tuvieron en el caciquismo una de sus más nefastas representaciones en Andalucía. Aun sin muchos datos para decir si fueron, cada uno de ellos, malas o buenas personas, podemos saber que contribuyeron a la corrupción del sistema y, a la postre, a su desaparición en brazos del autoritarismo. El otro día, en los jardines de “Los Patos”, pensaba, por ejemplo, en que la “blanca pelambrera” de la barba de Antonio Barroso y Castillo, que llegó a ocupar diversos cargos como ministro en Madrid, fue esculpida en un vistoso monumento esos mismos jardines a la muerte del político en 1916, para que así pudiera durar su memoria doscientos cincuenta o trescientos años. No duró ni uno: lo que tardó una manifestación obrera en hacer añicos aquellas figuras. Tal vez aquellas gentes se pensaban que era el principio del fin de esa lacra regional. Quién les iba a decir que, un siglo después, los cordobeses querrían volver a ser lo que fueron.

Sic transit